XV MARATÓN DE ZARAGOZA

Osquitar
Atletismo
07/04/2022

Tras 12 semanas de plan, me planté el 3 de abril en la salida del XV Maratón de Zaragoza. El día amaneció muy fresquito.Una “nortada” había traído heladas y nieve a la península. Y lo peor, viento. No tuvimos del todo mala suerte, porque la víspera el viento había sido muy fuerte, pero para el día de la carrera bajó hasta límites “aceptables”, aunque seguía siendo algo molesto.

 

Un poco influido por las chanzas que provoco por ir siempre más abrigado que el resto, me decidí por pantalón corto, manga corta con manguitos y tubular pero sin guantes. Menos mal que hasta la hora de la salida no me desprendí de un forrete polar. Hacía frío de verdad. La sensación térmica era menor que los 3º que marcaban los termómetros Tras las fotos de rigor, entramos al cajón azul (entre 3h. y 3h. 30’) Marcos, Corle, Jordi e Isaías. Luego cada uno iría a su bola. Yo me puse por delante, porque mi idea era ir con el globo de 3h. el máximo rato posible si mis sensaciones eran buenas. Si luego me descolgaba, cuanto más hubiera aguantado más posibilidades de mejorar marca a no ser que el descalabro fuera total. Este día, por primera vez, iba a arriesgar. No tenía mucho que perder. O mejor dicho, si había entrenado y me veía con posibilidades de acercarme a las 3 horas, prefería arriesgar y “petar” que arrepentirme de no haberlo intentado.Hace años veía al grupete del globo de 3h. con una envidia inmensa y la sensación de estar muy lejos de mis posibilidades. Tan solo el hecho de que actualmente me sintiera con fuerzas de aguantarlo bastantes kilómetros, suponía para mí una mezcla de emoción e incredulidad.

Salid

Se dio la salida, casi ha sido la vez que menos pereza tenía por salir, aunque solo fuera por tener menos frío. Creía que el globo estaría en nuestro cajón, pero no. De manera que tenía bastantes corredores por delante hasta él. Mala cosa. Este detalle creo que marcó toda mi carrera, no sé si para bien o para mal. Intenté cogerlo y logré situarme a unos 10 metros, a cola de un gran grupo compacto que le acompañaba. Otras veces que me he propuesto seguir a otros globos, prácticamente corría junto a ellos. Las sensaciones de los primeros kilómetros confirmaron que me sentía más o menos cómodo siguiendo el ritmo del globo, aunque permaneciera a una pequeña distancia. Ya sabía que al principio podría seguirlo, era un ritmo similar al del medio maratón un mes atrás. La incógnita era ver qué pasaría a partir del kilómetro 21.

 

En el kilómetro 5 bebí un par de traguitos de agua. El 10 me pilló en el lado malo, en el que no había mesas, y menos mal que nos íbamos pasando las botellas. Eso me pasó en varios avituallamientos, me cogían por sorpresa. Pasamos por Independencia, Almozara, Expo, Independencia de nuevo, Arrabal….En el Puente de Santiago estaba Ana animando. No lo esperaba. En el 14 me decidí a tomar una cápsula de sales. Tenía las manos tan heladas que me costó algunos minutos lograr cogerla para meterla en la boca antes del avituallamiento del 15. En cuanto me descuidaba o ralentizaba para beber un par de traguitos, el globo se iba a unos 20 metros. Digamos que iba a su ritmo, pero sin ir dentro de su grupete, más bien tras la cola del estirado grupo. La distancia variaba de una decena de metros a varias sin ninguna sensación de que se me fuera, pero tampoco me atrevía a realizar una aceleración exigente para colocarme junto a él. En cuanto al viento, sinceramente no sentí apenas que molestara, quizás tapado por los que me rodeaban.

 

Independencia

Los kilómetros iban pasando. Tras pasar el 21 cogí un gel y me lo tomé; no pensaba hacerlo y no lo había hecho en los entrenos, pero los últimos días al final decidí llevar dos. Apreté tan fuerte que parte me salió por la nariz. En algunas avenidas de ida y vuelta veíamos a los que nos precedían y luego a los que iban detrás. Tricas, Jorge, Corle, Marcos, Jordi…Los conocidos me decían que aguantara. Les veía en la cara que pensaban que el globo se me estaba yendo. Al pasar por Tenerías en el 26, vi a Jorge, retirado, pero que me animó estusiastamente. Mi sensación estaba siendo que los kilómetros no pasaban demasiado lentos. Ya estábamos en el 26… Sentimientos encontrados. Quedaba menos, pero quedaba tanto… En la rotonda de la Puerta del Sol, oí un grito de “Oscar, cabeza”. No sé si iba para mí y quien era, pero efectivamente dio en el clavo. Pensé que había que tirar de cabeza para no reblar. Físicamente iba bien, aguantando el ritmo. Tras hacer kilómetros por el centro y riberas más bien ”dando vueltas”, ahora básicamente quedaba ir al Parque Grande y volver. Quizás menos pesado, aunque lo que queda es lo que queda, pero a veces el cerebro es maniático, y prefería eso a lo anterior. Iba pensando en el 31 en el que estaría mi hermano, cerca de casa. Un par de veces o tres vi que, cuidado, se estaba estirando el gran grupete del globo de 3 h. y que se rompía. En esas ocasiones sí aceleraba un poco para seguir siendo “cola de león”. Si me quedaba cortado, adiós. Y con el globo a esos 20-30 metros por delante pasé por donde estaban mi padre y mi hermano. Cogí el segundo gel y me lo bebí en el 32, en la subida a Cuéllar. No recuerdo haber tomado más sales, aunque llevé tres y volví con una. Quizás se cayó al coger la otra. Y me vi incapaz de tomarme unas pasas que llevaba. Tras la subida a Cuéllar, la más importante de la carrera, me vio Jaime y me gritó “que no se te escape el globo, aguanta”. En realidad no se me estaba escapando, pensé, lo llevo así hace rato… pero el pelotón era ya más pequeño y estirado y daba esa impresión. Por el canal, llano, intenté reducir la distancia, pero lo hice poco a poco. Por el parque la había bajado a algo menos de 20 metros. Y lo mismo en la “subida a las Palmeras”, corta pero la de mayor pendiente. Pensaba que si mantenía la distancia, con el arreón final y que los globos suelen dejarse llevar los últimos kilómetro si llevan margen, lo pillaría o me acercaría lo suficiente para bajar de 3 horas. Porque lo veía posible.

Foto: Ana Urrea

Sin embargo, tras girar junto al canal para encarar los últimos 4 kilómetros de ligera bajada a meta, y mientras yo sentía que iba a un ritmo mantenido, el globo se me fue algo más, ya eran más de 50 metros. No lo podía creer. ¿No iba a poder seguirlo? Madre mía que me veía haciendo 3h y poco…. Esos kilómetros del 38 a 40 me vi nadando para morir en la orilla. Intenté apretar un poco. Me acercaba muy ligeramente. Rafa Cored se puso con la bici a mi lado y me dijo que iba muy bien; ni le pude contestar, solo pensaba en el puñetero globo. Además, ¿a qué se refería con “muy bien”? Porque ya no me valían las 3h. 00’ 00’’. Pero en el 40 miré el reloj y vi que me quedaban 12 minutos para las 3 horas. Un cálculo rápido me sirvió la conclusión de que manteniendo un ritmo de 5’/km me bastaría y sentía que iba bastante más rápido, mantenía los 4 y pico. Mi moral subió y me concentré en aguantar y quizás meter “medio piñón”, tampoco hacía falta volverse loco. Pero no vi el cartel del 41 y ya me estaba empezando a mosquear hasta que llegué a la Plaza de San Miguel. Volví a mirar el reloj, y como supuse que lo había tenido que pasar, ya que sabía lo que quedaba y había visto el cartel del 42 en D Jaime, me di cuenta con seguridad: lo iba a conseguir. Bajando D Jaime intenté saborear el “lo voy a lograr”. Ana estaba allí y percibí que también lo sabía. Al final, entrando en meta, vi 2h. 58’ en el marcador y me supieron a gloria.

 

Bajando D. Jaime

Conseguido. Había logrado bajar de 3 horas en maratón. Increíble. La liebre entró en 2h. 57’. Y por los ritmos de mi reloj, desde luego no se dejó llevar. Me hizo pasar un mal rato desde el canal…y me privó de más rato del “lo voy a lograr”, pero no me quejo.

Llegada

 

Gracias a todos los que habéis colaborado en que haya logrado esta pequeña proeza para mí. Fotos:  Móvil Corle, Fructofotos, Ana Urrea.

1

3:55

11

4:10

21

4:08

30

3:58

2

4:04

12

4:06

22

4:12

31

4:07

3

4:13

13

4:05

23

4:08

32

4:07

4

4:07

14

4:15

24

4:11

33

4:20

5

4:07

15

4:16

25

4:11

34

4:06

6

4:02

16

4:16

26

4:13

35

4:00

7

4:03

17

4:12

27

4:07

36

4:06

8

3:55

18

4:07

28

4:15

37

4:21

9

4:06

19

4:04

29

3:58

38

4:16

10

4:06

20

4:00

30

4:20

39

3:56

40

4:14

41

4:14

42

4:06

43

4:04

 

Somos un grupo deportivo, aficionados a diversas disciplinas como el running, trail running, ciclismo de carretera, btt, triatlón, montaña... Puedes contactar con nosotros, participar en nuestras quedadas, entrenamientos y seguirnos además en las redes sociales.
 

Envío y solicitud de información:
info@andandaeh.com